lunes, 2 de marzo de 2009

Rhodesia

Rhodesia fue el nombre dado durante el mandato británico a una amplia región conquistada por el empresario y mercenario Cecil Rhodes en el sur de África. Estas tierras se reorganizaron más tarde en dos regiones, Rhodesia del Norte y Rhodesia del Sur o sólo Rhodesia, que pasarían a llamarse tras su independencia Zambia y Zimbabue respectivamente:

- Colonia de Rhodesia del Norte, luego República de Zambia.

Cataratas Victoria (Zambia)



- Colonia de Rhodesia del Sur, luego República de Rhodesia, y luego República de Zimbabue.

Río Limpopo (Zimbabue)


Su nombre proviene del inglés Cecil John Rhodes que vivió en Sudáfrica una vida al aire libre desde los quince años, y se dedicó a una serie de actividades en los negocios de los diamantes, la política, y la exploración.

Construyó la línea ferroviaria entre Ciudad del Cabo y El Cairo, uniendo los territorios bajo dominio inglés ubicados en África; de este modo, las extensiones alcanzaron enormes dimensiones y en su honor las tierras se denominaron Rhodesia.

Las dos Rhodesias y Niassalandia fueron conquistadas por Cecil John Rhodes a finales del siglo XIX, partiendo de Sudáfrica, en nombre de Gran Bretaña. La situación demográfica y las riquezas descubiertas han diferenciado a los tres territorios: Rhodesia del Sur fue colonizada por los británicos que desarrollaron en ella una rica y productiva agricultura para la exportación; Rhodesia del Norte formó alrededor del Copperbelt (Cinturón del cobre, zona minera de Zambia) una zona industrial en la que obreros europeos y la mano de obra africana cohabitaron con dificultad, y Niassalandia, más poblada y poco apta para las explotaciones, que sirvió de reserva de mano de obra a los otros dos territorios y a Sudáfrica. La colonización reunió a mediados de los años 70 en Rhodesia del Sur a casi 275.000 blancos.

A partir del periodo de entreguerras, se introdujo en Rhodesia del Sur un sistema inspirado en las políticas seguidas en la misma época en Sudáfrica que restringían los derechos sindicales y económicos de los negros. Su expresión política está limitada por el censo y por los criterios de educación. En 1953, los británicos, que intentan preparar la emancipación de sus territorios, agrupan sus posesiones de África central en una federación destinada a preservar la complementariedad de las tres entidades. Concebida por Londres para garantizar un reparto progresivo del poder, la federación es mantenida por las compañías mineras de Rhodesia del Norte y por los colonos de Rhodesia del Sur, que ven en ella un modo de perpetuar sus privilegios. Se oponen a los nacionalistas africanos, que se hacen cada vez más virulentos después del final de la segunda guerra mundial y desean una llegada rápida a la independencia. Ante los disturbios que se desarrollan en Rhodesia del Norte y en Niassalandia entre 1958 y 1961, Londres acepta disolver la federación y concede, en 1964, la independencia a cada uno de estos territorios, en los que los nacionalistas africanos ganaron las elecciones. Tomaron el nombre, respectivamente, de Zambia y Malawi.

En los años sesenta y setenta del siglo XX, la descolonización en África central británica estabilizó las relaciones entre el gobierno de Londres y las antiguas colonias reunidas en la Commonwealth. La independencia autoproclamada en Rhodesia por la minoría blanca estructura el discurso de «África para los africanos». El paso del poder de los blancos a los negros fue citado como ejemplo de una posible evolución en Sudáfrica.